Villa Constitucion
Talleres y Riberas avanzaron a semifinales pero no se cruzarán
Luego de sacar una buena diferencia en el encuentro de ida, el Monstruo y la Academia se metieron entre los cuatro mejores del torneo donde se enfrentarán con Atlético Empalme y ASAC respectivamente.
Los dos conjuntos tuvieron una etapa regular muy buena y partido tras partido se fueron ganando el mote de candidatos por el buen rendimiento que mostraron. Todo daba a parecer que clásico a semifinales, pero la derrota de Unión cambió los cruces y finalmente el partido más esperado quedará sujeto a una posible final.
Talleres se metió en semifinales con una goleada
El Monstruo salió a la cancha con un 2 a 0 arriba que le daba una gran tranquilidad de cara a los 90 minutos finales con la presencia de sus habituales titulares y la inclusión de Federico Hernández en la zona delantera por Janu Ramírez.
El Rombo, consciente de que debía imponerse por dos goles para revertir la historia, salió a presionar bien arriba desde el primer minuto ante un equipo que no mostró en su mejor versión en el arranque del encuentro donde no se lo veía impreciso y que en varios jugadas quedaba mal parado.
Si bien el Rombo presionaba y encontraba superioridad numérica en algunas jugadas de los primeros minutos, malas decisiones a la hora de llegar al área o buenas intervenciones del arquero alejaban el peligro del arco tallarín. Para colmo, Distéfano, uno de los pilares de la defensa, sintió una molestia y salió reemplazado por Urunde, pasando Asplanatto de central y Mancini de lateral.
Cuando iban 35 minutos, Juan Maglier se fue solo por el sector derecho, se metió al área y sacó un remate cruzado que se pegó contra el palo, imposible para Riganti. Libertad sorprendía, daba el golpe y empezaba a soñar con la clasificación: le faltaba un gol para igualar la serie.
Sin embargo, la ilusión duraría lo que tardó Talleres en encontrar presición ofensiva. Sobre el cierre de la primera mitad, Tachu Heredia vio solo a Rojo y lo encontró con un preciso pase cruzado. Gabo controló y sacó un remate cruzado de derecha que se metió abajo ante una floja respuesta del arquero. Fue el grito de la tranquilidad. En el final del primer tiempo, Talleres volvía a sacar dos de ventaja en el global.
Convencido de dejarlo todo para cambiar la historia, el Rombo arriesgó un poco más en el complemento pero esto fue contraproducente porque dejó espacios y el Monstruo comenzó a jugar de la manera que sabe.
Tras un pálido primer tiempo, Talleres se convirtió en el equipo que le dio el tricampeonato. Preciso para mantener la posición, rápido para encontrar espacios y superioridad numérica, profundo e indescifrable a la hora de atacar con individualidades en un alto nivel.
A los tres minutos de la segunda mitad, Álvarez aguantó una pelota en mitad de la cancha y con un gran movimiento giró y habilitó a Heredia que se fue solo y ante la salida del arquero tocó al medio para Federico Hernández que convirtió un golazo con todo el arco a su merced.
Y empezó el monólogo de Talleres, de esos arrasadores que carecen de piedad con sus rivales. Hernández, suelto, con movilidad y confianza, empezó a jugar un partidazo, igual que Heredia, Álvarez y Urunde, al que se lo vio muy participativo.
Todo era del Monstruo y en una contra llegó la igualdad de Libertad a través de un penal. Juan Maglier fue el encargado de ejecutar, abrió el pie y la puso pegada al palo. Era el 2 a 2 que volvía a encender una luz de esperanza en el Rombo, aunque, esta vez, no era avalada por rendimiento.
Pero esa posibilidad duró poco: Talleres había salido a liquidar la historia y no pensaba aflojar. Inmediatamente después de la igualdad, el arquero del Rombo le sacó un gran cabezazo a Chuky Figueroa y, dos minutos más tarde, Urunde realizó una buena jugada por derecha, tiró un buen centro que rebotó en Muñoz y se metió en el arco propio.
Con la ventaja y un rival desganado, el Monstruo culminó la faena con una goleada. El cuarto llegó con una gran jugada de Maximiliano Heredia que terminó con un enganche en el área y un remate de zurda pegado al palo mientras que el quinto vino de la mano de un quite en la salida y un centro atrás para Rojo que le puso el broche de oro a la historia. Talleres fue una máquina de fútbol y contundencia en el complemento y volvió a dar muestras de llegar en gran forma a la etapa final del torneo.
Riberas aprovechó la diferencia de la ida
La Academia es semifinalista del torneo de primera división tras varios torneos sin ser protagonista y ya dio muestras de ser un equipo que se le anima a cualquiera ya que se fue consolidando partido tras partido y muy pocas veces fue superado futbolísticamente a lo largo de la etapa regular.
Riberas llegó a Bogado con la clara ventaja de 3 a 0 que había obtenido en la ida y sabía que tenía que ser inteligente para controlar la diferencia y no llevarse ninguna sorpresa ante un equipo que se hace muy fuerte en condición de local.
El conjunto de Scheggia contó con varias chances en la primera mitad para aumentar la diferencia pero fue el equipo de Bogado, con Edgar Monjes, el que marcó el único tanto del encuentro que terminó 1 a 0 a favor del local.
De esta manera, Riberas se metió entre los cuatro mejores y finalmente enfrentará a ASAC en lo que promete ser una serie apasionante con un antecedente reciente: hace pocas semanas se enfrentaron hace muy poco en la etapa regular con un empate 1 a 1 en el Gabino. En la otra llave se medirán Atlético Empalme y Porvnenir Talleres, en lo que también prometen dos partidos muy entretenidos y disputados.
Semifinales- Encuentros de ida
ASAC vs Riberas
A.Empalme vs P.Talleres
Cuartos de final – vuelta.
P. Talleres | 5 | Libertad | 2 |
Goles: Gabriel Rojo-2-, Maximiliano Heredia, Federico Hernández, Guillermo Muñoz e/c (PT) Juan Maglier-2-(LIB)
Terna arbitral: Martín Cardoso, Daniel Torres y Bruno Loero
Global: Porvenir Talleres 7 – Libertad 2
M. Moreno | 1 | Riberas | 0 |
Goles: Edgar Monjes (M. Moreno)
Terna arbitral: Marcelo Maciel, Leonel Franco y Eduardo Sosa.
Global: Mariano Moreno 1 – Riberas del Paraná 3