La tarde se prestaba para que el local Laprida y Argentinos Diadema protagonicen un encuentro entretenido, y así fue que el local se puso en ventaja a los dos minutos a través de su defensor Valeriano,Gustavo, que se adelanta en un centro ejecutado por Cano a la salida de Robles, y con un golpe de cabeza marca.

Es más el local, situaciones en el arco de la visita se producen constantemente, la triangulación y los espacios eran bien cubiertos por el equipo de Alvino, y así llega el segundo a los 21’ a través del mismo jugador, y de la misma forma para aumentar el marcador.

Poco tiempo duro el espectaculo para la vista de la gran cantidad de gente, que se acerco a ver el encuentro, porque a los 25’ todo se tira por la borda. Primero por la agresión de Sebastian Valeriano hacia el juvenil Ariel Pinto, al aplicarle un trompis en el rostro, y después el ingreso del ayudante de la visita, y le aplica un cabezazo al jugador local en el rostro. Al caminar hacia el tunel, después de los insultos recibidos de la gente local responde con provocaciones. Luego sale del vestuario e insulta y trata de resolver por mano; originándose tensión al limite, que luego se transformaría en una batalla entre la gente de la visita y la hinchada local. Algunos jugadores de Diadema, al ver la situación van en protección de sus familiares que se encontraban allí; lluvias de piedras y un jugador herido Marcelo Ojeda -de Diadema- con un corte en el rostro.

Hasta cuando se podra soportar esta situación?. Es un juego, nada más que un juego, y las personas que incitan y provocan, lamentablemente no tendrían que ir a una cancha o a otro espectaculo. Hoy peligro la vida de un jugador y mañana tocará a otros.

El colorario de este bochorno, determinó que el árbitro Juan Carlos Díaz, determine la suspensión del juego, sobre los 28 minutos de la etapa inicial por falta de garantías. Ahora, el Tribunal de Penas de la Liga de Futobl, deberá determinar los pasos a seguir…pero el futbol volvió a perder.

Fuente: Diario Cronica